Concurso Leer a Martí. Memorias Edición 2016.Bonito titulo

11/3/2021
Por: Jessica Álvarez Bellas, Biblioteca Nacional José Martí

De la Isla de la Juventud presentamos hoy a esta ganadora de 13 años y 8vo grado que fue ganadora en el año 2016 del Concurso Leer a Martí, recuerden que es un certamen que convoca cada año la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí

La naturaleza humana según Martí

Por Olga Delia López Matos

He de preguntarme a diario el por qué tanta agresividad en las personas que me rodean en la sociedad. Donde vayas están las fieras más temidas de la especie humana, esas que todos llevamos ocultas y parece ser son las que están determinando las relaciones sociales y me darán el lugar que ocupo y ocuparé en la vida.

Es difícil entrar al aula y no pensar en liberar estas bestias sociales, por mucho que me lo propongo hay veces, que son la mayor parte del tiempo, las dejo encerradas porque recuerdo una frase de José Martí, escrita en La Nación, Buenos Aires, el 26 de octubre de 1884, en una de sus cartas decía: 

“El mundo animal está en concreción en toda asociación a persona humana: cada hombre lleva en sí todo el mundo animal, en que a veces el león gruñe y la paloma arrulla y el cerdo hocea…y toda virtud está en hacer que del cerdo y del león triunfe la paloma”.

Y recuerdo bien esta fecha porque yo nací un 26 de Octubre, pero del año 2002, y me gustan las coincidencias, me ayudan a aprender.

Pues sí, ante situaciones tensas pienso en esta máxima martiana y es, entonces, que se desata la lucha entre mis fuerzas ocultas y mi condición razonable.

Pero reacciono: encierro a mi león para que no gruña  y si lo hace que sean menores los daños, cuando me regañan por cometer el mismo error, el cerdo que llevo dentro lo dejo en ayunas para que no meta el hocico donde no debe, pues él solo piensa en comer y embarrarse de lodo todo el tiempo, y libero a la paloma que arrulla, aunque a veces tanto arrullo parece molestar (por eso de que todos somos concreción del mundo animal).

Al igual que “el amigo sincero” defiendo la verdad que se encierra en la paloma, como símbolo mundial por la paz. Jamás liberaría a las otras fieras antes de prepararlas para una convivencia pacífica. 

Así quería “El Apóstol” que fuera su ahijada, María Mantilla, y en cartas del año 1895 publicadas en el “Cuaderno Martiano II” se lo sugiere diciéndole: estudia para que te respeten los hombres buenos, para que te cultives, pues no hay cosa que de más elegancia al cuerpo que la belleza de la virtud, ama a tu madre, quiérela por los dos, ayuda a los necesitados, entre otras ideas que dejan ver, claramente, la naturaleza del autor, exponiendo, sutilmente, que en la vida no hay espacio para cerdos y leones sin que triunfe la paloma.

Esa niña creció e hizo suyas en acciones lo que su padrino le lego, ella se hizo una pianista famosa y así domesticaba, a mi juicio, las fieras que llevaba ocultas, solo las dejaba salir transformándolas en palomas que arrullaba con la música que brotaba del trabajo que le dio amansar estas bestias.

De ahí que cuando voy a regañar a mis compañeros de aula hago mías en mi actuar la frase de Martí “dejar que venga la paloma que tanto el cerdo como el león llevan dentro, hasta ellos llevan palomas en sí mismos”.